En el día de hoy miles de personas miran con sorpresa el proceso de paz de Irlanda del Norte.
El reverendo Paisley(DUP) y el republicano Adams(SINN FEIN), al fin, han llegado a un acuerdo para gobernar en Irlanda del Norte. La fecha para hacer realidad el acuerdo será el 8 de mayo cuando ambas fuerzas restauren la autonomía. No obstante, antes de la fecha han declarado que celebrarán varias reuniones para elaborar un programa de trabajo común.
Hace unos años parecía que la comunidad católica y protestante eran irreconciliables y que estaban condenados perpetuamente a no conocer la paz. Pues bien, la actitud de unos y otros, cansados de sufrimiento, muerte, discriminación, odio y violencia, ha variado. Muchos de lo protagonistas, no hace mucho, empezaron a mostrar su descontento ante los años de violencia en declaraciones que realizaron recogidas en monografías como la de Rogelio Alonso "Matar por Irlanda".
Aunque el asunto irlandés nunca ha sido el mismo que el vasco, los batasunos han querido favorecerse de la imagen norirlandesa. Cosa que es patética pues no tiene ni siquiera más enemigo que la voz y el voto de toda la ciudadanía. Ni en cuestión de cultura, ni de creencias, ni de forma de pensar, se asemajan. Yo no he visto a un Otegui que declare ir los domingos a misa, cosa que del señor Adams sí; desde su punto de ética credeencial aspira al arrepentimiento y a la rectificación, a pesar de renunciar a su orgullo, pues sabe que es lo que puede marcar el inicio del bienestar de sus paisanos. Ésa es la diferencia. Hay otros que quieren vivir del cuento sin dar un palo al agua.
